viernes, 4 de junio de 2010

martes, 1 de junio de 2010

martes, 11 de mayo de 2010

PALABRAS DE AMIGOS A CAMARON

José Luis Ortiz Nuevo: "Fue cuando salió su nombre en los papeles y las gentes comenzaron a oír sus gemidos de llanto casi adolescente; entonces todos los gitanos imitaron su voz y hasta se peinaban de la misma manera que se peinaba él; Camarón, un camaroncillo isleño, tan rubio y tan menúo, estremeciéndose por los tercios de los fandangos, pidiéndole a su mare Juana el queso aquel que era la luna, hambre todavía en los recuerdos del gitanito, cantaor desde siempre cuando se escapaba y se iba a las juergas de la Venta Vargas a escuchar a Caracol y a cantar él, en las rodillas del maestro; Camarón un camaroncillo isleño, revolucionario del cante, creador, puro en la pureza que no se mide con los clichés, sino con el corazón y con la rabia; buena gente,tímido, sencillo en la grandeza de su arte, artista fundamental para el flamenco de nuestra época, maestro ya, tan jóven, imitado y seguido, también, ¿y como no?, tachado de falsear los ritmos, él que es capar de cantar el Quijote, metío en bulerías, porque sabe y puede".

.......Escuchar a Camarón era saber que el desamparo es nuestra herencia, pero también era advertir, maravillados, que en el fondo de la desolación nos aguardan la autenticidad, la fraternidad y la felicidad. En sus sonidos negros advertíamos el luto inexorable de la especie infortunada a que pertenecemos, pero allí, al fondo, en la espesura de los sonidos negros, hallábamos también el esplendor de nuestra inocencia. Camarón era más que un cantaor flamenco: era nuestro embajador por el territorio de la desgracia y era a la vez el que arrancaba la desgracia a suspiros extraordinariamente calientes y cordiales que acariciaban nuestra conciencia desolada y la volvían momentáneamente feliz. Le debemos a Camarón la evidencia de que "los hombres somos animales inconsolables" y también la evidencia de que en el fondo de nuestro desconsuelo habitan la eternidad, la dicha, la liberación.......

Félix Grande

"Como cantaor, Camarón fue, por un lado una de las gargantas mejor afinadas del flamenco, y al mismo tiempo, una de las voces más desamparadas de la historia del flamenco. Y luego, la medida de su genio la da el hecho de que llegó con la misma intensidad a las multitudes y a los especialistas como una criatura genial sin haber inventado nada. No necesitó inventar nada para ser un genio"

Félix Grande


"Camarón ha sido uno de los artistas andaluces más profundos que he conocido en toda la historia del flamenco. Para mí es el que más me ha llenado de todos los cantaores"

Vicente Amigo

PALABRAS DE AMIGOS A CAMARON

José Luis Ortiz Nuevo: "Fue cuando salió su nombre en los papeles y las gentes comenzaron a oír sus gemidos de llanto casi adolescente; entonces todos los gitanos imitaron su voz y hasta se peinaban de la misma manera que se peinaba él; Camarón, un camaroncillo isleño, tan rubio y tan menúo, estremeciéndose por los tercios de los fandangos, pidiéndole a su mare Juana el queso aquel que era la luna, hambre todavía en los recuerdos del gitanito, cantaor desde siempre cuando se escapaba y se iba a las juergas de la Venta Vargas a escuchar a Caracol y a cantar él, en las rodillas del maestro; Camarón un camaroncillo isleño, revolucionario del cante, creador, puro en la pureza que no se mide con los clichés, sino con el corazón y con la rabia; buena gente,tímido, sencillo en la grandeza de su arte, artista fundamental para el flamenco de nuestra época, maestro ya, tan jóven, imitado y seguido, también, ¿y como no?, tachado de falsear los ritmos, él que es capar de cantar el Quijote, metío en bulerías, porque sabe y puede".

.......Escuchar a Camarón era saber que el desamparo es nuestra herencia, pero también era advertir, maravillados, que en el fondo de la desolación nos aguardan la autenticidad, la fraternidad y la felicidad. En sus sonidos negros advertíamos el luto inexorable de la especie infortunada a que pertenecemos, pero allí, al fondo, en la espesura de los sonidos negros, hallábamos también el esplendor de nuestra inocencia. Camarón era más que un cantaor flamenco: era nuestro embajador por el territorio de la desgracia y era a la vez el que arrancaba la desgracia a suspiros extraordinariamente calientes y cordiales que acariciaban nuestra conciencia desolada y la volvían momentáneamente feliz. Le debemos a Camarón la evidencia de que "los hombres somos animales inconsolables" y también la evidencia de que en el fondo de nuestro desconsuelo habitan la eternidad, la dicha, la liberación.......

Félix Grande

"Como cantaor, Camarón fue, por un lado una de las gargantas mejor afinadas del flamenco, y al mismo tiempo, una de las voces más desamparadas de la historia del flamenco. Y luego, la medida de su genio la da el hecho de que llegó con la misma intensidad a las multitudes y a los especialistas como una criatura genial sin haber inventado nada. No necesitó inventar nada para ser un genio"

Félix Grande


"Camarón ha sido uno de los artistas andaluces más profundos que he conocido en toda la historia del flamenco. Para mí es el que más me ha llenado de todos los cantaores"

Vicente Amigo

martes, 13 de abril de 2010